viernes, 21 de septiembre de 2007

La Dona Inmóvile (o de cómo son traidoras las reinitas)

"La donna è mobile
qual piuma al vento
muta d'accento
e di pensiero"
Ópera Rigoletto, Acto III
Música de Giuseppe Verdi, Libretto de Francesco Maria Piave


Una vez una amiga me preguntó que cómo se jugaba el póker pues ella veía que yo hablaba mucho de eso y que realmente me gustaba. Así que le expliqué lo básico del póker clásico de 5 cartas y luego mi versión favorita el Texas Hold'em. Después de un tiempo a ella también le empezó a agradar esto de las cartas y un día me dijo que si jugabamos una partida de 5 card draw (el póker de 5 cartas) a lo cual yo acepté con gusto y singular alegría. Yo mesmo repartí las cartas y descubrí en mi mano dos Reinas, así que decidí cambiar las otras tres cartas que no me servían de nada. En este punto veo que mi amiga, la Lupititite, muestra cara de emoción por lo que infiero que le dí buen juego, probablemente una tercia o dos pares. Retiro entonces mis tres cartas inútiles y procedo a preguntarle cuántas cartas quiere cambiar:

-Dos... ¡No! Mejor una, nada más una...

Entonces pensé: "Ajá, entonces sí le di una tercia, pero pues pa qué cambia nomás una debería cambiar las dos... Allá ella". Y le dí su carta. Procedo entonces a repartirme mis tres cartas mientras veo que ella está visiblemente emocionada, por lo que me pongo a la defensiva. Hasta el momento sé que sólo tengo un par de Reinas y ella seguro consiguió su Full House (si no es que es un póker) así que veo mi juego: 8 de diamantes, reina de espadas, reina de corazones, reina de tréboles y reina de diamantes. Póker de Reinas. Las cuatro damas. Reunión de la UVA. Pinche jugada poderosísima marca nomamesyachingué.

Con un pinche ademán así de todo un campeón de la Serie Mundial de Póker le digo:

-Ok, qué tienes...

Y lentamente fui bajando las manos para mostrar mis cartas así como en abanico. Con una sonrisota en el rostro mi amiga hace lo mismo y casi al mismo tiempo se ven ambas jugadas: mis cuatro Damas [de la vida galante].... ¡Y sus cuatro aces! No pude hacer nada más que soltar un sonoro: "¡No mames!" Mientras ella se moría de la risa. Pinches reinas me odian.


Las traidoras Hijas de su rebarajeadísima Madre
burlándose por haberme hecho perder de manera tan descomunal



Ayer otra vez mostraron su irrefrenable odio hacia mi pokerística persona. Teniendo AA de entrada, el buen amigo Bluffiel (El Rey del Biutiblof) igualó mi aumento de la apuesta con QQ tan solo para obtener las otras dos Q's en el "flop" y el "turn" (las tres primeras y la penúltima cartas comunitarias del Texas Hold'em respectivamente. A la quinta carta comunitaria se le llama "river". Si no conocen estos términos, entonces ¿pa qué chingados les pongo tanto pinche vínculo referente a esa información en el texto anterior?). Un rato después yo obtuve QQ y perdí contra un par de reyes. Por eso estoy de acuerdo con la ópera de Verdi. Me permito hacer la traducción pa los que no "cactaron" la idea:

"La mujer es voluble
como pluma al viento,
cambia de palabra
y de pensamiento"

Y sí, las Reinas de la baraja (y en la vida real) lo han demostrado en diferentes ocasiones.

Iosephus Dixit.

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